Sri Lanka es el tercer país que más té produce en el mundo. De esta isla al sur de India proviene el té Ceilán, uno de los tés negros más consumidos y valorados por su intenso aroma y sabor. Te invitamos a conocer más sobre el origen de este popular té.
El té nació en China y se estima que se bebe hace unos cinco mil años. En casi todos los países asiáticos hay alguna leyenda que explica el origen del té. Una de las más famosas es budista y asegura que mientras meditaba bajo un árbol, Buda contempló los sufrimientos y graves problemas que enfrenta el hombre en su vida. Conmovido, dejó caer una lágrima y justo donde cayó, creció el arbusto de té.
Indudablemente, el té es parte importante de la cultura inglesa, como la reina, James Bond, Los Beatles, Harry Potter y el Big Ben. La costumbre tan arraigada de beber té en Inglaterra se originó en el siglo XVII, primero en los estratos sociales más altos de la sociedad y ya en el siglo XIX se expandió a todas las esferas.
Sin duda, el té es una bebida muy popular entre los chilenos y también alrededor del mundo. Se dice que el té llegó a nuestro país durante el siglo XVIII, gracias a un marinero inglés que regaló un paquete de té a un vecino en Valparaíso, contándole lo popular que era la bebida en Inglaterra.
Durante su tiempo como reina consorte, Catalina de Braganza es recordada por la introducción de la costumbre de beber té en la corte inglesa, un bebida consumida habitualmente por la corte portuguesa ya que la importaron de sus colonias en Asia. El hábito se copió en los salones de gran parte de la aristocracia y la nobleza, y el resto es historia.